José Muñoz: Un Hito en la Industria Automotriz
José Muñoz, un destacado directivo de 59 años originario de Madrid, celebra en 2025 su nombramiento como consejero delegado mundial de Hyundai Motor Company. Este logro lo convierte en el primer extranjero, así como el único español, en alcanzar una posición de esta magnitud en una empresa surcoreana. Desde su despacho en California, Muñoz comparte la sensación de responsabilidad que conlleva su nuevo rol, y señala que en sus visitas a Seúl, muchos se preguntan por qué fue seleccionado entre los 300,000 empleados del grupo. “Siempre te están observando y tienes que demostrar constantemente tu capacidad”, afirma, comparando su situación a la de un jugador de fútbol, donde cada decisión y resultado cuenta.
En un contexto de creciente competitividad, el salario es un factor crucial que influye en la carrera internacional de muchos ejecutivos españoles. Según datos de la aseguradora AON, los salarios de los directivos en diferentes países revelan disparidades notables. En España, el salario fijo promedio para un ejecutivo en una empresa de tamaño medio es de aproximadamente 200,000 euros anuales. Esta cifra se eleva considerablemente en Estados Unidos, alcanzando casi 287,000 euros, y en Singapur, donde los ejecutivos promedian 310,000 euros anuales.
Al considerar la remuneración variable a corto plazo, los ejecutivos españoles perciben más de 257,000 euros al año. Sin embargo, en otras naciones, como Arabia Saudí y Singapur, estos ingresos son significativamente mayores, superando los 462,000 y 456,000 euros respectivamente. La disparidad se agranda aún más al sumar todos los conceptos retributivos, donde el ejecutivo español apenas supera los 300,000 euros anuales, mientras que en Arabia Saudí se duplica esta cifra, superando los 600,000 euros, y en Singapur se superan los 572,000 euros. Sorprendentemente, Portugal destaca como el país que ofrece los salarios más bajos a sus directivos, un 24% menos que los de España.
Este panorama salarial refleja no solo la amplitud de oportunidades que hay fuera de España, sino también el reto que enfrentan los ejecutivos españoles que desean mantener su nivel de vida en el extranjero. La capacidad de adaptación y agilidad de estos líderes en un escenario económico volátil es crucial para inspirar confianza entre las multinacionales internacionales que los contratan.
En tiempos de incertidumbre, la historia de José Muñoz no solo representa un triunfo personal, sino también un ejemplo de cómo los directivos españoles están a la vanguardia de la gestión global, lidiando con desafíos económicos y buscando un equilibrio entre sus logros y las expectativas salariales. Como concluye Muñoz, “la clave está en demostrar constantemente el valor que aportamos”.
Esta consolidación de talento español en el ámbito internacional no solo destaca la importancia del liderazgo y la experiencia, sino que también invita a una reflexión sobre las condiciones que propician y limitan el crecimiento de estos profesionales en su país natal.
